En Taxus&Reels somos expertos en bioseguridad y ofrecemos múltiples servicios y soluciones para el sector agrícola y ganadero. En este último campo, el control de insectos y plagas es crucial para garantizar la salud de los animales, la productividad y la calidad de los productos derivados. Es así como los insecticidas son clave para combatir este problema, pero no todos son iguales ni cumplen las mismas funciones. Te contamos en este artículo cuáles son las características de los insecticidas para el sector ganadero. Así podrás elegir el producto adecuado y aplicarlo de forma eficiente y segura.
¿Qué son los insecticidas para la ganadería?
Los insecticidas son sustancias químicas o biológicas que han sido diseñadas para eliminar o controlar insectos que afectan a los animales y las instalaciones ganaderas. Estos productos son fundamentales para proteger a los animales de enfermedades transmitidas por vectores, como moscas, garrapatas y mosquitos; estos pueden generar estrés, infecciones y pérdidas económicas significativas.
Principales características de los insecticidas
Al elegir un insecticida, es importante considerar diversas características que determinarán su efectividad y seguridad:

Espectro de acción
Una de las características de los insecticidas que debes considerar es su espectro de acción. Estos productos pueden ser de amplio espectro o de espectro reducido. En el primer caso, estos son efectivos contra una amplia variedad de especies de insectos y son ideales para instalaciones con múltiples tipos de plagas; en el segundo caso, los productos han sido diseñados para combatir especies específicas, como moscas o garrapatas y se usan cuando se conoce la plaga predominante.
Mecanismo de acción
Los mecanismos de acción de los insecticidas pueden ser:
- Contacto. Eliminan a los insectos cuando entran en contacto con el producto. Este tipo de insecticidas es ideal para superficies y áreas frecuentadas por las plagas.
- Ingestión. Actúan cuando los insectos los ingieren, afectando así su sistema digestivo. Estos productos son efectivos para los organismos que consumen alimentos contaminados.
- Inhalación. Los insectos respiran el producto y, cuando esto ocurre, el insecticida actúa. Suelen utilizarse a manera de aerosoles.
Características de los insecticidas: Presentación y eficacia
Te contamos que los insecticidas pueden ser líquidos, venir en formato de polvos, cebos o aerosoles. Los productos líquidos son fáciles de aplicar utilizando pulverizadores o sistemas de nebulización; por su parte, los polvos son la mejor alternativa cuando se trata de aplicarlos en áreas de difícil acceso e, incluso, para aplicar directamente sobre los animales. Los cebos buscan atraer y erradicar insectos específicos, mientras que los aerosoles son comunes para aplicaciones rápidas y focalizadas.
Por otra parte, estos productos pueden ser de acción rápida o residual. En el primer caso, los insectos se eliminan de inmediato, aunque los efectos pueden ser de corta duración. En el segundo caso, el producto mantiene su eficacia durante semanas o meses, cosa que ofrece un control prolongado.
Toxicidad
Por último, los insecticidas pueden ser:
- De baja toxicidad. Están diseñados para minimizar el impacto en los animales y los humanos.
- Selectivos. Son específicos para insectos y reducen el riesgo de dañar otras especies beneficiosas.
Beneficios del uso de insecticidas y cómo utilizarlos
El uso adecuado de insecticidas en la ganadería ofrece múltiples beneficios. En primer lugar, previenen enfermedades transmitidas por insectos, es decir, protegen a los animales. Esto supone un aumento en la productividad, pues los animales sanos y sin estrés producen más leche, carne y huevos. Por otra parte, los insecticidas también mejoran la calidad de los productos porque reducen la contaminación de alimentos y derivados animales.
Al evitar la infestación de pulgas, garrapatas, ácaros, etcétera; también se reducen los costes veterinarios y la necesidad de tratamientos médicos. Por último, los insecticidas también garantizan la higiene en las instalaciones ganaderas porque mantienen los establos libres de plagas.
Cabe destacar que para garantizar la eficacia y seguridad de los insecticidas, es fundamental seguir buenas prácticas en su aplicación:
- Lee las instrucciones. Es esencial seguir las recomendaciones del fabricante en lo que a dosis, frecuencia y métodos de aplicación se refiere.
- Usa equipos de protección. El personal encargado de la aplicación debe utilizar guantes, mascarillas y la ropa adecuada para evitar entrar en contacto directo con el producto.
- Evita la contaminación. Es muy importante no aplicar los insecticidas cerca de fuentes de agua, alimentos o áreas donde los animales de la granja puedan ingerirlos de forma accidental.
- Rota los productos. El uso de un mismo insecticida puede ocasionar resistencia en las plagas, por eso es crucial rotar los productos con diferentes activos.
- Supervisa de forma regular. Realizar inspecciones periódica para evaluar la eficacia del programa de control de plagas y ajustar las dosis es esencial.